Pero superando el posible "sesgo" político que se le está atribuyendo, voy a referirme a las acusaciones que sobre su "gestión científica" se viene acumulando en los diferentes medios.
En ese campo, yo no veo correcto cuestionar a la OMS.
Al igual que medios que si son especializados, desde marzo publiqué en las RRSS que Trump y Bolsonaro estaban «MFP» en sus estrategias iniciales sobre el COVID-19, no soy experto pero era demasiado evidente (incluso si revisan esos post, en uno, un "amigo" español se ofendió mucho y luego les tocó a ellos, que también la tiñeron de marrón).
En el caso de Trump es infantil querer "escurrir el bulto". El es uno de los casi 50 Presidentes que están en riesgo dejar de serlo después de su torpe estrategia y ahora trata de desviar el asunto acusando fervientemente a la OMS.
No suena prudente aceptar las crítica de los presidentes que desatendieron, en las primeras de cambio, las recomendaciones que la misma OMS hacía (y Trump, hasta se mofaba cuando afirmando que en los EEUU los casos no iban a pasar de 15 porque "lo tenía todo bajo control" y Bosonaro consideró que "Es apenas una pequeña gripe o resfriado")
Tampoco puedo apoyar a los inmorales investigadores "postmodernos y complejos" porque ellos si que en casi un siglo no tienen una sola cosa que mostrar... ¡ni una sola que no sean palabras vacías! (que por cierto, en honor a la diversidad, tienen una estética deplorable, pero entre gustos y colores...). Eso si, no tiene moral de nada, porque sin utilidad para los humanos no hay ciencia.
Tampoco voy a considerar a los "influencers", actores, cantantes, animadores que se presentan como expertos evaluadores. Los bufones tienen su papel muy marcado dentro de los sistemas políticos y el de protagonizar no es el correcto.
Ah! y nuestros amigos los politiqueros (nótese que no dije políticos, el que se ofenda es politiquero)... Pues ¿con que moral cuestionan algo los que dañan todo lo que tocan?
Quienes cuestionan a los argumentos científicos de la OMS son los mismos que apoyaron el fraude cubano del interferón, y el fraude estadounidense de la cloroquina, y las vacunas falsas,las pruebas de poca confiabilidad [fraude en los científico, en lo financiero esas mentiras produjeron fortunas]. Y son quienes viven en países de mucho contagio [europeos] y son quienes a pesar de tener familiares cercanos fallecidos por COVID-19 usan su fama para desinformar a otros (que perversión, Miguel Bosé).
La OMS, las Universidades, los centros de Investigación, los laboratorios y afines; están aprendiendo sobre una variante del coronavirus que hace 6 meses nadie conocía. Lo hacen con el método apropiado según el objeto que estudian y la estricta necesidad de una robustez objetiva. Están en una fase inductiva, no deductiva. Están aplicando la vía hipotética, la mejor posible (¿es qué acaso van a descubrir algo sentándose a reflexionar sobre la estética?).
La ciencia, la verdadera ciencia es falible, acumulativa y se corrige constantemente. El conocimiento sobre algo nunca es acabado. Eso es lo que genera que a veces lo que en un momento se considera cierto, luego resulte falso...
Yo voy a seguir creyendo en la gestión científica de la OMS (apartando sus "desvíos políticos, que si los hay), voy a seguir creyendo en las Universidades y en los investigadores de la verdadera ciencia.
A los demás ya no hay que tomarlos en cuenta.
Hola! Soy un anacoreta, todólogo, cinefilo, opinador equivocado, fotomaniaco, viajero, medio geek, adoptado digital y economista al que le interesan un montón de cosas. Quiero compartir en este blog todo lo que puedo, desde mis intereses hasta mi visión de mundo, mis ideas y consideraciones sobre la realidad y pedazos de mi vida.
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